Hoy recordamos a Bartolomé Mitre (1821-1906), fundador del Colegio Nacional de Buenos Aires y promotor de la educación pública en Argentina. Como presidente de la Nación, Mitre llevó adelante un proyecto educativo ambicioso. El 14 de marzo de 1863, mediante el Decreto N° 5447, fundó el Colegio Nacional de Buenos Aires, institución educativa secundaria destinada a formar jóvenes de todas las provincias bajo un plan de estudios integral, que combinara las humanidades y las ciencias morales con una formación científica en sintonía con la época. Este acto se enmarcó en una visión más amplia: construir un sistema educativo nacional que fuera cimiento de la República. El CNBA, junto con otros colegios nacionales fundados posteriormente en la Ciudad de Buenos Aires y a lo largo de todo el país, fue pieza fundamental de esta estrategia. La creación del colegio reflejó el pensamiento de Mitre sobre la educación como herramienta de progreso y unidad nacional. Sus ideas sobre la importancia de la educación pública permanecen vigentes hasta el día de hoy. A 203 años de su nacimiento y a 161 años de aquella iniciativa, el panorama educativo ha cambiado significativamente, pero los principios de una educación pública de calidad y accesible siguen siendo fundamentales. El aniversario del nacimiento de Mitre nos invita a reflexionar sobre su legado y, más especialmente, a preguntar cómo podemos mejorar la educación en Argentina para enfrentar los desafíos actuales y futuros. Dos Cuadros de Mitre Comandando la sala de profesores del Colegio Nacional de Buenos Aires, desde hace décadas, se encuentra un imponente cuadro de Bartolomé Mitre sentado en su escritorio. Este cuadro, de considerables dimensiones, lo muestra rodeado de libros en su escritorio y en las paredes, un globo terráqueo y un diario abierto en sus manos. A sus pies, se puede ver un plato de agua, posiblemente para un perro. Este cuadro fue pintado por Joaquín Luque Roselló (Málaga/España 1864 - Buenos Aires/Argentina 1932), quien fuera profesor del Gabinete de Plástica del Colegio hasta el año 1932.
Un cuadro similar, quizás una segunda versión, se encuentra en el Museo Mitre (San Martín 336), también pintado por Luque Roselló. Aunque algunos detalles cambian, en esencia la situación es la misma: ambos cuadros están basados en una fotografía del General Mitre en su Biblioteca Americana hacia finales de 1900, trabajando en su histórico escritorio presidencial.