Publicado en Física, el lunes 21 de noviembre de 2011

Sr. Rector, Sres. Vicerrectores, docentes, familiares, querida Comunidad Educativa. En nombre del Departamento de Física quiero agradecer la presencia de todos Uds., en este día tan especial. Se es profesor por variadas circunstancias, pero se es docente sólo por una razón: creer en el futuro, trabajando en el  presente para la formación de personas, en cualquier nivel en que nos desempeñemos. Va más allá de un trabajo, de un título o de un cargo y tampoco se agota en la vocación. Es la elección de una forma de vida que se asume desde la labor diaria, las exigencias, la lucha, la esperanza y la alegría de hacer lo que elegimos ser.

No se es docente por trabajar en el ámbito educativo, se lo es por creer en el hombre y en la sociedad y fundamentalmente en la educación como una herramienta para transformar el mundo. Es por eso que homenajeamos hoy al prof. Oscar Perazzo, Fue docente del Departamento de Física durante 55 años en el Colegio Nacional de Buenos Aires. En sus clases varias generaciones de alumnos aprendieron física.

El profesor Perazzo nació en 1923. Fue Maestro Normal Nacional, título otorgado por la Escuela Normal de Profesores “Mariano Acosta”, y en julio de 1947 egresó del Instituto Nacional Superior del Profesorado “Joaquín V. González” con el título de Profesor de Física. Comenzó como ayudante de Trabajos Prácticos junto con el profesor Santiago Carbone, ambos convocados por el Ing. Juan Batana, por entonces jefe de Departamento. A partir de 1953, ocupó el cargo de profesor de Física. Y desde 1965 hasta 2003, durante 37 años ininterrumpidos, fue jefe del Departamento de Física. Hasta el día de su jubilación fue un trabajador incansable, jamás dejó de estar actualizado.

Sus alumnos recuerdan sus clases: claras, precisas, ordenadas. El respeto que supo merecer no le impidió mostrar un carácter paternal y considerado, lejano de actitudes demagógicas. En una entrevista realizada en el 2008 para la revista de la Asociación Cooperadora, el profesor Perazzo decía: “el Colegio fue para mí un segundo hogar; fueron muchos años, un lugar grato para dar clase. Grato, porque mi actuación como jefe del Departamento de Física resultó favorecida por la excelencia académica del personal docente siempre dispuesto a contribuir positivamente para el éxito de la tarea pedagógica del área. Grato, además, porque uno contaba con elementos que no eran solamente tiza y pizarra, y grato, por último y muy importante, por la respuesta del alumno”

Fue autor de dos libros de física que aún hoy siguen vigentes para docentes y alumnos. Quisiera destacar que los mismos fueron hechos partiendo de bases experimentales, incorporando dibujos para la mejor comprensión del alumno, hecho novedoso para los textos de la época. Recuerdo siempre como nos contaba la experiencia de traer al colegio un dibujante para que presenciara e ilustrara los experimentos que se realizaban con instrumental del gabinete.

Finalmente quisiera hacer una reflexión acerca de Oscar Perazzo: así, simplemente, sin anteponer a su nombre ningún título. Me gustaría que ese fuera el principal mensaje. Cada uno de nosotros tiene un recuerdo especial de él como persona: acompañando los proyectos vanguardistas de muchos docentes, aconsejándonos en cuestiones personales, siempre presente en los acontecimientos importantes de nuestras vidas: bodas, recibimientos, nacimientos, apoyándonos en todo momento, y siendo generoso con su tiempo para escucharnos cuando así lo necesitáramos.

Es por todo que al descubrir esta placa le decimos ¡Gracias Prof. Oscar Perazzo! ¡Gracias maestro!

Prof. Adriana Bilgray
Jefa de Departamento - Física